Este método de limpieza se suele utilizar en casos de olores fuertes y desagradables, como por ejemplo después de un incendio.

El ozono es una molécula del oxígeno, se representa (O3) y es suministrado por una máquina de uso sencillo y tarda unas 48 horas en hacer el efecto deseado. También existen unas máquinas “fijas” que son de uso diario y se colocan en servicios, vestuarios, etc. las cuales necesitan una renovación de aire para atajar los malos olores.