Las naves de los polígonos industriales así como los viales y mobiliario urbano, deben seguir unas líneas de limpieza distinta de las oficinas o comunidades de propietarios normales en las que la limpieza se enfoca más hacia planos en los que la estética y colocación de enseres requiere de un mayor interés.
Es lógico que en un polígono industrial la limpieza vaya enfocada a otros parámetros. En un polígono industrial entran por ejemplo camiones de alto tonelaje, grúas y carretillas, que generan mucha suciedad.
La limpieza en estas naves se ha de hacer con una periodicidad espaciada en el tiempo, por ejemplo una vez al mes, pero siempre usando maquinaria especifica, como fregadores industriales limpieza con chorros de presión, etc. Conviene hacer un repaso de limpieza después de cada descarga de un camión en el muelle, pues es habitual que se derramen líquidos u otros objetos de la propia descarga. Además, si un camión llega a descargar a un muelle que está limpio de suciedad, seguro que la descarga se realizará en mejores condiciones, tanto de salubridad como de prevención de riesgos laborales.
También se debe realizar la limpieza de los alrededores de nuestra nave. Es decir, los viales comunes que forman parte de nuestro polígono industrial. Estas viales, al ser calles poco transitadas suelen crecer yerbajos en los bordillos y cerca de las paredes de las naves que habrá que mantener a raya. Además, hay grandes cubos de basura que se mantendrán limpios a través de chorros de agua a presión con lejía.
Por último, debemos mantener limpios los desagües para que el sistema de alcantarillado funcione correctamente.